Tarifa de Alcance de Madrid y los carteros Andarines
En esta época donde internet nos permite comunicarnos con
casi cualquier parte del mundo de manera casi instantánea, o mandar correos
electrónicos a casi cualquier rincón del mundo, a un click de ratón nos puede parecer
chocante, ciertas formas empleadas para garantizar la correspondencia.
Durante siglos el correo postal ha sido uno de los medios
más empleados para la comunicación a larga distancia, pero no solo en el ámbito
particular sino también en otras facetas como las relaciones comerciales, por
eso las distintas administraciones de correos de distintos países adoptaban una
serie de medidas para tratar de que se pudiera entregar eficazmente la
correspondencia y de la manera más rápidamente posible.
El ferrocarril como hemos visto en los artículos publicados
en este blog , fue usado también como un medio para transportar la
correspondencia.
Las cartas se depositaban en los buzones y en un determinado
momento se cerraba la reja del buzón y la correspondencia era depositada en los
trenes. ¿Pero que pasaba si alguien tenía prisa por entregar la misiva y el buzón
estaba cerrado? O esperaba a la salida del siguiente tren, pero si era urgente,
¿Que hacían?
Por eso nació la
denominada Tarifa de Alcance que no hay que confundir con el Correo de Alcance,
ya que el Correo de Alcance es un concepto más amplio, que hace mención a unos
buzones que había en las estaciones para que la gente depositara la
correspondencia, cuando las oficinas de correo estaban cerradas.
Pero antes de hablar de la tarifa de Alcance vamos a definir
brevemente lo que es el Alcance,
Javier Padin Vaamonde en el libro “Diccionario
de Filatelia” lo define como:
“Correo Extraordinario despachado por las Administraciones
para alcanzar al ordinario en un determinado punto y hacerle entrega de la
correspondencia que dicho correo ordinario no pudo trasladar, por haber sido
depositada en la oficina postal después de la salida del mismo”.
El 14 de abril de 1869, Juan Moratilla, Inspector Jefe de la
Sección Central de Comunicaciones, promulgo un aviso donde se regulaba como
funcionaba, los horarios y las tarifas de Alcance.
“Anuncio del establecimiento de los Correos Alcance:
Habiendo aprobado la
Dirección General de Comunicaciones lo propuesto para esta sección para el
establecimiento de los alcances, al correo express, que aventaje el publico en
general y el comercio en particular una hora mas para poder dirigir su
correspondencia, se previene que desde el día 15 del actual dará principio a
este nuevo servicio, situándose un empleado con una cartera buzón en la Puerta
del Sol, esquina calle Arenal, a las dos en punto de la tarde, hora en la que
se cierran los buzones de esta sección central para el citado correo express,
el cual permanecerá hasta las dos y media, y permitirá la introducción de
correspondencia, siempre que sea dirigida precisamente para la línea Norte, y
tenga adherido, además de los sellos naturales de franqueo, otro de 25 céntimos,
que representara el pago por derecho de este primer alcance. A las dos y media
se retirara el empleado y aparecerá otro en la misma forma en la plaza de Prim,
inmediato al estanco, que permanecerá recibiendo correspondencia con el recargo
de 50 céntimos, como segundo y ultimo alcance hasta las tres en punto de la
tarde.
Lo que para el conocimiento del público, se inserta en el
presente aviso.
Madrid 14 de abril de 1869.
El inspector Jefe de la Sección Central de Comunicaciones,
Juan Moratilla”
Vista General de la Puerta del Sol en torno al año 1870, autor J. Laurent. Fuente wikipedia
Por esta circular tradicionalmente se piensa que el primer
lugar de España en donde se aplica la tarifa de alcance, es en Madrid, desde el
15 de abril de 1869 y luego se fue extendiendo a otros lugares de España,
aunque hay investigadores que consideran que pudiera haber aparecido en otros
lugares anteriormente.
Plano de Madrid por D. Carlos Lassailly, 1877. Fuente Flick de la Bilioteca Nacional.
La tarifa de alcance para algunos estudiosos del tema puede
considerarse como precursor del correo urgente, ya que este sistema permitía
que pagando una cantidad adicional se pudiera ganar un día en la entrega de la
correspondencia.
Y esta tarifa de alcance de Madrid, correspondía a las
cartas que circularan por la Línea del Norte
Había dos tarifas de alcance:
En el primer alcance
que según Carlos Celles, en su libro Tarifas
Postales, había que pagar adicionalmente 5 céntimos, además de la tarifa
habitual. El cartero se situaba en la esquina de la Calle Arenal y la Puerta de
Sol, desde las 14.00 hasta las 14.30 horas, y con las cartas que le entregaban,
iba corriendo hasta la Estación del Norte (actual Estación de Príncipe Pío).
Carta con Tarifa de alcance en la emision gobierno provisional en carta circulada al extranjero, con su tarifa de 12 Ctos y las 25 Milesimas para el pago del primer alcance al ambulante norte. Colección Manuel Benavente. Fuente ágora de filatelia
En el segundo alcance, que según Carlos Celles, en su libro Tarifas Postales,
había que pagar adicionalmente 10 céntimos. El cartero se situaba en la actual
Plaza de Opera o de Oriente desde las
14.30 hasta las 15.00 horas, para recoger la correspondencia y salía corriendo
hasta la Estación del Norte. Si te interesa conocer más datos sobre la historia de esta Estación puedes consultar un artículo que hace tiempo escribí en este enlace
Fotografía del año 1864 de la Primitiva Estación del Norte. Fotografía obtenida de Foro trenes
También hay que señalar que estas tarifas había que
franquearlas por separado del porteo.
A los carteros que se ubicaban en la Puerta de Sol esquina arenal, para el primer alcance, o en la Plaza de Opera para el segundo alcance, se le denominaba como Carteros Andarines.
A los carteros que se ubicaban en la Puerta de Sol esquina arenal, para el primer alcance, o en la Plaza de Opera para el segundo alcance, se le denominaba como Carteros Andarines.
A consecuencia de que el alcance no se refiere a una modalidad
de servicio sino de recogida de la correspondencia no se hace constar en las
cartas que son de alcance, ya que se entendían que era de alcance solo por
entregarlas a los carteros situados en la Puerta de Sol o en la actual Plaza de Opera
Además hay que entender que para agilizar este método, el
funcionario encargado de recoger la correspondencia, solo tomaban las cartas,
ni pesándolas, ni rellenando formularios ni matasellándola.
Este sistema que se fue extendiendo a otras localidades que
tuvieran ferrocarril estuvo en vigor hasta finales de siglo XIX cuando aparece
el Correo de Alcance y se colocaron en distintas estaciones, los denominados
buzones de alcance, en los que las cartas llevan el matasello alcance.
Es decir, que las cartas de tarifa de alcance no suelen llevar
ningún tipo de marcas alusivas a la tarifa de alcance, ya que el matasellos
alcance, hace mención al correo de alcance, y por lo tanto son cartas muy
difíciles de diferenciar, si son de alcance o las cartas llevaban un exceso de
franqueo.
Vemos otro post cualquiera por si le encontraras alguna utilidad?