¿Sabías que…? El correo en lata o el “Tin Can Mail”.
Hoy quiero hablaros de un sistema de correo muy poco usual y
cuya historia es bastante desconocida, y que en la era de Internet, donde nos
podemos comunicar casi instantáneamente con cualquier parte del planeta, con un
click de ratón o pulsando un botón, nos puede parecer chocante este sistema,
además en una época en la que el correo epistolar no tiene la importancia de
antaño.
Pero durante siglos, el sistema postal era vital, como medio
de comunicación entre personas, y el medio más efectivo para comunicarse con
personas en la distancia. Por ello
cuando por lo que fuera había dificultades, se recurría a una serie de
sistemas peculiares, para garantizar que se recibiera la correspondencia.
Como este caso del que voy a hablar, donde nos remontamos al
año 1882 cuando William Travers, solicito a los servicios postales de Tonga el
poder utilizar latas de bizcochos de 40 libras o de keroseno, para poder
transportar hacia los barcos de vapor que llegaban a la isla, o viceversa, la
correspondencia. De esta manera nacía el "TIN CAN MAIL SERVICE".
William vivía en Niuafo’ou, una pequeña isla entre Fiji y
Samoa, una isla formada por un volcán, y donde no podía llegar las barcas a
remos, ni ningún barco, porque no existía ningún puerto o playa natural, que
posibilitara a los embarcaciones poder atracar en la isla.
La isla vista desde el aire. Fuente: http://www.pngtours.com/tours/southpacific2.htm
Era gerente de una plantación de copra, que pertenecía a una
empresa australiana.
Travers en el año 1882 se vio obligado a buscar un sistema
postal que le permitiera comunicarse con su empresa en Australia. Por ello se
puso en contacto con los servicios postales de Tonga y les propuso un método
bastante inusual.
Usaban latas de galletas o keroseno totalmente selladas para
introducir la correspondencia, y alguien a nado llegaba a los barcos a vapor,
que surcaban las islas, y le entregaba la correspondencia. Además el barco le
entregaba la correspondencia para que la pudiera llevar a la isla.
Normalmente se recurría a los pescadores de la isla, pero se
tuvo que buscar otros métodos alternativos porque por la zona había tiburones,
y porque a pesar de la corta distancia a la orilla (1 milla) un hombre a nado
podía tardar 6 horas, por las fuertes corrientes.
En el año 1902 se intento usar cohetes, pero no resulto y en
múltiples ocasiones el cohete explotaba durante su trayecto de la isla al barco,
o por la trayectoria del cohete superaba a la isla.
En el año 1922, llega a la isla, Charles Ramsay, como
gerente de otra plantación, y para poder comunicarse con su empresa, el tomo la
responsabilidad de recoger nadando el correo, llegando a realizar 122 salidas.
Incluso se entregaba correspondencia por la noche. El
sistema era el siguiente. El barco tocaba una sirena para avisar de su llegada,
y un grupo de nadadores partía a recogerlos, uno llevaba una lámpara. Además la
orilla se señalizaba con antorchas para facilitar el trabajo de los nadadores.
Pero como he mencionado anteriormente en la zona había
tiburones, y un tiburón ataco a uno de los nadadores. Salote, la reina de
Tonga, prohibió esta práctica. Por esta razón se tiraba una canoa a remos desde
una roca y los nadadores nadaban hacia la canoa, para realizar el trayecto.
En el año 1928 Walter George Quensell, se dio cuenta del
gran interés, que podía tener este sistema de correos para los
filatelistas, y se le ocurrió fabricar
tampones para indicar que las cartas habían pasado por Niuafo’ou.
Pauline Hoeft, Walter G Quensell y su esposa Emma Hoeft : Fuente http://livedoor.blogimg.jp/tincan/42cd73d8.jpg
Además se llego a un acuerdo con los capitanes de los navíos,
para que toda carta que llegara con el franqueo de vuelta pagado, se le marcara
con tampones para señalar que la misiva había pasado por allí. Los capitanes
también fabricaron tampones indicando el barco que transportaba la carta.
El éxito que tuvo este sistema fue enorme, muchos
coleccionistas, querían tener cartas circuladas por Correo en Lata, así que
desde todo el mundo, se recibía cartas mandando el franqueo e incluso por 1£,
se le incluía alguna serie básica.
Por la gran demanda que tuvo se realizaron tampones en múltiples
idiomas, incluso el jefe de policía tenía su propio tampón.
Para la isla también tuvo mucha importancia ya que en lugar
de que llegara un barco una vez al año, le visitaban con más frecuencia, y
además de correspondencia, con los barcos entraba también el comercio.
En el año 1946 una erupción volcánica sepulto media isla, y
aunque no hubo victimas mortales, la emisora y la casa de Quensell, fueron
destruidas, y con ellas los tampones.
Por una carta que Quensell mando a un amigo se conoce que
durante 27 años, Quensell mandó más de 1.500.000 de cartas a 148 países y que
en los últimos años llegaron barcos con no menos de 40.000 cartas, sobre todo procedentes
de Estados Unidos.
En el año 1962, los habitantes de la isla, pidieron que se
volviera a reactivar el sistema para poder tener comunicación exterior, y este
sistema estuvo en funcionamiento hasta el año 1983, cuando se abrió un
aeropuerto
Vemos otro post cualquiera por si le encontraras alguna utilidad?